Friday, March 26, 2010

Botada del Tinker Toy

Como va eso amig@s (vieron que cool que soy, soy e-ncreible).
Bueno como prometí, acá van fotos de la botada,
La culminación de meses de espera, trabajo y dudas...
Flotara???
Como ya les comente en el post anterior, con Fer arreglamos el pasacascos y estábamos mas que seguros del trabajo que habíamos hecho. Por ese agujero no iba a entrar agua (bueno eso decíamos de la boca para afuera, por adentro tanto yo como casi seguro el teníamos nuestras dudas). Igual esa no era la única de nuestras preocupaciones, el barco tiene 17 pasacascos o sea 17 preocupaciones.
Una la habíamos instalado nosotros, bah en realidad 3, dos en proa, los agujeros ya estaban de antes, y la que instalamos a nuevo nosotros. Y estaban mas que chequeados, estaban rechequeados, llenos de sellador y con más vueltas de teflon en las roscas de las que puedo recordar. Fer es de la escuela de “ante la duda Teflon®”.
así que tenemos 3 pasacascos listos en los que confiamos ciegamente...
Eso nos deja con 14 dudas con un enorme potencial para hundirnos...
Obviamente antes de botar al Tinker, revisamos todos los grifos de fondo (sinónimo de pasacascos, ahora entienden porque digo pasacascos? Grifo de fondo es muy largo) los engrasamos y nos fijamos de que cerraran bien. Todo muy lindo, cierran, pero no nos garantiza que sean a prueba de agua, o que el agua se filtre por la junta entre estos y el casco. Recordemos que uno de los pasacascos estaba literalmente despegado...
así que bueno, temprano la mañana del 16 de enero compre unas donuts prepare café y me fui al barco, la botada ya era inevitable.

Tomamos un café con los mecas, comimos las donuts y tratábamos de ocultar el temor que nos comia un poco por adentro... Ed me dijo que el estaba 110% seguro de que no ibamos a tener ningun problema, Joel me dijo que el siempre tiene sus dudas, que es un poco como la voz de la conciencia del equipo. Yo como de costumbre me sentía mas cercano a la posición de Joel, Fer , Obviamente, a la de Ed. Pero eso no es nada nuevo, siempre fuimos así...

Bueno a las 10:30 llegaron con el travelift (grua para barcos) encincharon al Tinker, lo levantaron y acarrearon en su lenta marcha al mar.





Ahi viene el travelift
Aca estamos haciendo los preparativos para que lo suban al travelift
Fer “bajandose” del Tinker por ultima vez (de ahora en mas nos embarcamos y desembarcamos)
Yo, dandole una mano
Fer, Ed y yo mirando como levantan al Tinker
A todo esto no se imaginan el quilombo que dejamos detrás ni la cantidad de cosas que se encontraban al pie del Tinker las tuvimos que sacar luego de botarlo.
Lo que quedo del campamento gitano
Ahi va el Tinker
Casi en el agua




Casi
Fer haciendo los honores
Bienvenidos a bordo

Una vez en el fozo, lo bajaron lentamente, luego de dos intentos (y darse cuenta que tenían mal conectados unos cables) los mecánicos lograron encender el motor.

Increíble, en el cockpit (donde esta la rueda del timon) ni se oia el motor, ahora bien, abajo había un poco mas de ruido y en la sala de maquinas era bastante insoportable, pero en lineas generales mucho mas silencioso de lo que esperaba.

Todavía con las cinchas puestas y el motor corriendo, empezamos a revisar uno a uno, todos los pasacascos... ninguno hacia agua.... Increíble, fue como si me sacaban de encima un collar de bochas.
Pero oh oh esta entrando agua... no se entendía bien por donde podía ser, pero había agua juntándose en el fondo de la sentina...
Acaso podía ser el peor de los temores?
No que el agua entrase por un pasacascos (que puede ser sellado o bloqueado por un tapon).
Sino que el agua estuviese entrando por alguna grieta en el casco, alguna grieta que se nos halla pasado por alto.
Al final de cuentas el dueño anterior lo estrello bastante fuerte (por las consecuencias que les conté en el post anterior) contra un muelle. En una de esas alguna grieta estaba comprometiendo nuestra flotabilidad...

Por suerte, y después de algunos minutos de nervios, Joel descubrió el origen del agua.
la manguera de refrigeración del prensaestopa del eje no estaba conectada y el agua entraba por ahi...

Con eso solucionado, y con el motor ronrroneando, nos bajaron completamente y nos sacaron las cinchas... ahora teníamos que llevarlo a su nuevo hogar, la amarra C14, una amarra para barcos de hasta 50 pies...




Chau travelift
Fer timoneando al Tinker hacia su nuevo amarre

El barco andaba lo mas bien, pero el viento complicaba bastante la maniobra, Fer lo timoneo hasta la nueva amarra, pero dado el tamaño del Tinker, el viento, y el hecho que no es un barco fácilmente maniobrable en espacios reducidos, no pudimos entrar en nuestro espacio asignado, en vez nos metimos en una amarra para barcos de hasta 65 pies, en la que entramos lo mas panchos y con espacio de sobra por todos lados...
Terminamos de amarrar todos los cabos, que dicho sea de paso no teníamos preparados, entre tanta emoción nos olvidamos de tener listos los cabos de amarre... así que teníamos que sujetar el barco a mano mientras atábamos todo en su lugar. Los que conocieron y tuvieron el placer de navegar en el grumete pueden pensar, ah una pavada, con una mano te agarras al muelle con la otra al barco y listo, eso es muy cierto para el grumete, pero este barco es un poquito mas grande que el grumete y la verdad que con viento no es muy fácil de sujetar..




Fer atando cabos
Yo con un aproach un poco distinto

Pero bueno cabos por aquí, cabos por allá y el barco estaba seguro en su amarre (no saben las ganas que tengo de decir sogas, pero no, No, no no, en náutica las sogas son cabos... hablemos con propiedad).




El tinker, lindo y seguro en su amarra

Después de tener todo asegurado, teníamos que festejar la botadura del Tinker, como no era su viaje inaugural de nada servia estrellar una botella de champagne en la proa, tenia mas sentido tomarla.
así que Melissa diligentemente fue a su casa a buscar una botella de champagne que había sobrado de año nuevo y unos vasos para celebrar con Ed, Joel, y Fer .

Ahh para los que no saben, estoy un poco de novio, y si si, se llama Melissa.
En algún otro post les cuento mas.

Aunque el barco no hacia agua, no estábamos fuera de peligro, como en casi todo, las primeras 24 horas son criticas. así que esa noche dormí muy pero muy poco, por un lado me despertaba cada 2 horas para chequear que no entrara agua en la sentina y por el otro lado, el barco, ahora en el agua, hacia todo tipo de ruidos que eran nuevos para mi...
todos potenciados por la oscuridad reinante. De noche todo se oye mas fuerte es algo así como dormir en una casa nueva... raro... y con el miedo de que la casa se empiece a hundir en el medio de la noche...

Pero no, no se hundió, es mas, no hizo ni una sola gota de agua...
El Tinker flota y es waterproof!!!




El campamento gitano ahora abordo del Tinker Toy
Mas fotos del tinker en el agua despues de la primer noche
El Tinker a la distancia

Video de la botadura

Abrazos
Fran