Después de 8 dias de pelearnos con las corrientes ridículamente fuertes y anárquicas de la desembocadura del Amazonas, llegamos al puerto de Sao Luis do Maranhao.
Sabemos que este no era el destino original, pero un problema menor con la driza del foque (soga que sube la vela de adelante del barco, noten como no utilice la palabra proa, para hacerlo lo menos marineril posible para los no entendidos), que se solto en el tope del mastil y nos dejaba sin poder utilizar esa vela. Y sumado a un pronostico poco favorable que nos envío Mariano al satelital, en el que se anunciaban vientos mas fuertes de lo que teníamos ganas de soportar, nos hicieron tomar la sabia decisión de pegar media vuelta, ponernos viento en popa y dirigirnos a Sao Luis, puerto que habiamos pasado hacia un dia.
Ir viento en popa era raro, en todo el viaje lo mas cercano fue algun traves bajando por el caribe, el viento hasta ahora para nosotros era siempre de frente. Pero no fue dificil acostumbrarse y volvimos sobre nuestros pasos tirados como de la nariz por una pequeña vela de proa, la trinquetilla, que probo ser invaluable.
Tal como planeamos, llegamos a puerto al amanecer, navegando entre enormes buques tanques y de contenedores fondeados a la salida del puerto, y entramos junto a la marea entrante.
Nuestro primer intento de fondeo fue justo en frente de la ciudad, que desde el agua se ve muy linda. Ahí nos quedamos lo suficiente como parta preparar el almuerzo, pero justo cuando nos aprontabamos a dormir una merecida siesta, nos contactaron por radio los prácticos del puerto y nos convencieron de movernos de ahí, por un lado hay mucha amplitud de marea (3 metros en cuadratura y casi 6 en sisigia, con esto los mate...jajaja igual es facil googleenlon) y sumado a la cantidad de bancos que hay corriamos el riesgo de quedar varados en la bajamar. Segundo, desde donde estabamos se podia ver a lo lejos una favela construida sobre el agua. Por un lado esta la ciudad con sus edificios modernos y sus construcciones antiguas y pintorescas y justo al lado esta este asentamiento construido sobre pilotes, una especie de villa 31 pero en este caso en vez de estar en el medio de la ciudad, esta desplazada hacia el agua. Y los practicos nos dijeron que habia que "estar de olho". O sea que el sitio a pesar de ser muy lindo y conveniente (estabamos a 5 minutos de gomon de la ciudad) no era el apropiado y nos dieron direcciones para llegar hasta el fondeadero de las lanchas de pilotaje, desde donde ahora les escribo.
Por primera vez en mucho tiempo legamos a un puerto un dia de semana y no un sabado, algo que ya estabamos celebrando. Después de las idas y venidas terminamos de acomodar todo y bajamos a tierra al atardecer, que aca es siempre cerca de las seis, hablamos con los practicos y nos enteramos de que:
a) Ya era tarde para hacer ningun tramite (cosa que ya sabiamos de antemano pero la enumero para añadir dramatismo).
b) El dia siguiente, o sea hoy 7 de Septiembre, es feriado nacional en Brasil
c) El 8 de Septiembre es feriado estdual por ser el aniversario numero 400 de la fundación de la ciudad.
Que se le va a hacer? la "maldición" del Tinker Toy se cumple nuevamente y estamos en puerto en una especie de sabado artificial.
La idea de bajar a tierra era para bañarnos con agua dulce y conseguir conexión de internet para ponernos en contacto con el mundo. Internet imposible no aca en el puerto y solo en la ciudad, en algun cyber (que de casualidad abra un feriado) y bañarnos solo con una manguera al lado del muelle. Esto ultimo no representa ningun problema, pero por suerte uno de los practicos nos dijo que mejor lo acompañaramos y nos llevo hasta el vestuario donde pudimos darnos una gloriosa ducha con abundante agua dulce.
El agua debio tener algo raro, porque junto con ella caia de a golpe todo el cansancio de una semana y poci en el mar, asi que ya limpios y humanos nuevamente, desistimos de cualquier intento de ir a la ciudad y simplemente volvimos al Tinker, cenamos frugalmente, brindamos con un rico vino por haber cruzado el ecuador y por la perfecta navegada y en minutos estabamos prontos a dormir y no eran mas de las 8!
Hoy con la luz de un nuevo dia, que pinta ventoso como el de ayer, nos aprontamos a hacer algunas reparaciones menores pero necesarias en la jarcia, acomodar algunas cosas en el barco y salir para la ciudad a caminar sobre tierra firme y hacer un poco de turismo.
Saludos y abrazos a todos
Fran desde el TT en Maranhao
Enviado desde mi CrackBerry a bordo del Tinker Toy